Videojuegos, informática y medioambiente
Por Olivia Poy (estudiante de máster e investigadora en ESI).
Creo que no seré la primera alumna de informática que se metió a la carrera con ideas de “quiero hacer videojuegos en el futuro” y lo más seguro es que tampoco seré la última. Si bien mi paso por la carrera me ha enseñado que el mundo de la informática tiene muchos más caminos de los que creía y, por unas cosas u otras, he dejado de lado la idea de dedicarme al mundo de los videojuegos, estos siguen teniendo un lugar bastante especial para mí como hobby.
Antes de entrar a la carrera, invertía el tiempo extra que tenía (que bien sé que era más del que tengo ahora) en videojuegos y en mi otro hobby favorito, los juegos de rol de mesa (Dungeons and Dragons, Cyberpunk, etc.) [1]. Fue comparando estos dos que me di cuenta de una cosa. A simple vista, los juegos de rol de mesa consumen grandes cantidades de papel, tanto para anotaciones como para impresiones, lo cual me dejaba una mala sensación como si acabara de talar el mismísimo Amazonas mientras me iba de la impresora con mis 20 hojas de papel impreso. Sin embargo, los videojuegos no parecían consumir ningún recurso y nunca me había sentido mal por el medioambiente tras jugarlos.
Ahora, cuatro años después, tengo una clara respuesta a esta duda, los videojuegos sí que impactan al medioambiente, así como lo hace cualquier otro software. Para la “yo” de antes de entrar a la carrera, esto parecería una locura. ¿Cómo va a impactar a la naturaleza algo que ni siquiera tiene forma física?
La respuesta está en que aunque el software no tenga forma física, se ejecuta en un hardware, el cual necesita electricidad para funcionar correctamente y la generación de esta energía requiere de una alta emisión de CO2 que acaba impactando negativamente al medioambiente.
Esta conclusión de causa y efecto puede parecer un poco cogida con pinzas al remontarse tan atrás en el ciclo de producción de la electricidad. Sin embargo, ya son varios estudios los que demuestran que no es así y que el software tiene un impacto mayor del que parece a simple vista.
Por poner un par de ejemplos, en 2022 se realizaron más de 6000 millones de búsquedas diarias en Google [2] y se visualizaron unas 1000 millones de horas de contenido cada día [3]. Se estima que para producir energía para cubrir este consumo, se emiten unos 22500 KT/año de CO2.
Teniendo en cuenta que el mercado de los videojuegos está creciendo a un gran ritmo [4], podemos afirmar que estos forman una parte significativa del software mundial. Por lo tanto, un hobby que al principio parecía no impactar en nada a la contaminación del planeta, resulta ser que sí que contamina bastante.
¿Qué podemos hacer?
Visto esto, ¿nosotros como profesionales de la informática, qué podemos hacer?
- Concienciarse
Una parte importante de la lucha contra la contaminación del software (y que en parte es también el motivo de la existencia de este artículo) es concienciarse de que el software contamina y ayudar a concienciar a los demás.
- Seguir buenas prácticas
Hay muchos grupos de investigación dedicados a entender y tratar de frenar el impacto del consumo energético del software en el medio ambiente. Grupos como el Green Team [5] del grupo de investigación Alarcos (del cual formo parte) tratan de descubrir buenas prácticas en el desarrollo del software que hagan que el software resultante consuma bastante menos.
- Optimizar
Cualquier persona que tenga un cierto interés por los videojuegos ha oído hablar de la optimización de éstos. Los problemas de optimización son una de las causas de grandes lanzamientos desastrosos de la industria en los últimos años.
La industria de los juegos móviles parece tener esto más en cuenta debido a que el consumo de batería de los dispositivos móviles es una prueba más notable a simple vista que el consumo energético de un ordenador. Sin embargo, el resto de la industria del videojuego parece no darle la importancia que se merece debido a que las plataformas de desarrollo de videojuegos como Unity o UnrealEngine hacen transparente al programador cosas de bajo nivel vistas en asignaturas de la carrera como “Sistemas Operativos” y no siempre utilizan la opción más óptima. Es por esto que si se usan dichas plataformas, se debería hacer un esfuerzo aún más activo en tratar de optimizar todo lo posible el software resultante.
¿Significa todo esto que deberíamos dejar de jugar videojuegos porque contaminan?
NO, en absoluto. Los videojuegos son una gran fuente de entretenimiento que seguro que muchos de los alumnos de la carrera apreciamos en gran medida. El objetivo de concienciarnos con el consumo energético del software es tratar de desarrollar software respetuoso con el medio ambiente.
En definitiva, hacer el mundo mejor, que para eso estamos los informáticos.
Referencias
[1] https://es.wikipedia.org/wiki/Juego_de_rol
[2] https://netbulbsocialmedia.com/noticias/estadisticas-seo-2022/